La versión de la ensaladilla que preparan en el restaurante El Sifó es más ligera que la rusa, prima hermana de la escalivada y perfecta para comer tal cual o untar encima de una tostada.

MIKEL LÓPEZ ITURRIAGA 

No creemos que haya mayor honor para una patata que terminar sus días dentro de una ensaladilla, pero no todas corren esta suerte, porque algunas acabarán fritas, al vapor o en forma de puré. Por eso decidimos pedirle a Olivier Guilland -copropietario junto a Elena Garriga del restaurante de tapas barcelonés El Sifó-, la receta de su ensaladilla rusa, que no lleva este tubérculo y está para chuparse los dedos. .

Guilland, que como todos los franceses es un apasionado verdurófilo, apostó por preparar un plato fresco que mezclara algunos de los componentes de la ensaladilla rusa con el toque catalán de la escalivada. Coronada con un poco de mayonesa, la mezcla invita a untarla en finas tostadas o picos y acompañarla de una buena copa de vino o un vermut. Está pensada como aperitivo, pero puedes tomarla a cualquier hora porque, al fin y al cabo, ¿qué es el aperitivo sino un estado mental?

Ingredientes

Para 6 personas

  • 420 g de berenjena asada sin piel
  • 180 g de tomate fresco pelado y picado (sin semillas)
  • 180 g de bonito del norte en aceite
  • 180 g de pimiento rojo (se puede no asar y usar piquillos de lata)
  • 120 g de mayonesa (con 1/4 de diente de ajo majado si se quiere)
  • 6 cucharadas de olivada negra o tapenade
  • 1 chorro de aceite de oliva

Preparación

  1. Asar la berenjena y el pimiento (si no se usa de lata) unos 45 minutos a 180 grados. Pelarlos.
  2. Esta ensaladilla se sirve por capas: primero la berenjena picada, encima el pimiento picado, después el bonito en lascas y al final la mayonesa. Puedes usar anillas y emplatar individualmente o hacerlo en una fuente currándote un poco la presentación.
  3. Decorar con el tomate, la olivada o tapenade y un chorro de aceite de oliva virgen. Una vez en la mesa, romperlo y comer.

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